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Martín Alsogaray tiene 28 años, es oriundo de la ciudad de San Pedro, le faltan ocho materias para recibir el título de  Ingeniero Agrimensor en la FCEIA y hace algunas semanas llegó de Río de Janeiro donde participó de los últimos Juegos Olímpicos. Su paso por las Olimpiadas fue como entrenador de su hermano mayor Julio Alsogaray, quien finalizó décimo en la categoría Laser Masculino en el deporte Vela.

Tanto Martín como Julio comenzaron su actividad deportiva desde muy chicos en el Club Náutico San Pedro donde forjaron su pasión por la navegación. Martín no sólo es entrenador sino que también compite nacional e internacionalmente pero en una categoría diferente, denominada Laser Radial. Además de dedicarse al deporte, el hermano menor de los Alsogaray optó por estudiar Agrimensura en la FCEIA y ya está cerca de obtener el título. “Entre los viajes, el deporte y también la necesidad de tener que trabajar por algunos momentos la carrera se me fue estirando pero por lo menos el final ya está más cerca” indicó.

Sobre la experiencia de participar por primera vez del máximo evento deportivo a nivel mundial, el estudiante de Agrimensura explicó: “La verdad que me lo tomé tranquilo, en definitiva termina siendo un campeonato más porque si bien se hace una preparación más puntual y nunca pasas tres meses antes en el lugar de la competencia, después en sí durante el campeonato nosotros nos aislamos bastante de todo lo que es el conjunto de los Juegos y la Villa Olímpica. Intentamos mantenernos más alejados para poder correr más tranquilos.”

JJOO


Los hermanos llegaron a Río de Janeiro algunos meses antes del inicio de la competencia para poder conocer y adaptarse a las particularidades del lugar. No se alojaron en la Villa Olímpica ya que la misma se encontraba en Barra de Tijuca, ubicada a 50km al sur de Río y ellos debían competir en el Club Marina da Gloria, en la Bahía de Guanabara más al centro de la ciudad. “Nos quedaba como a una hora y media en auto, entonces para hacerlo todos los días era demasiado, y después tener que estar 5 o 6 horas en el agua entrenando, volver a trasladarte con la ropa mojada, llegás tarde y no se te seca para el otro día. Entonces pedimos al ENARD, que es el ente que apoyo a los deportistas amateur, si nos podían alquilar un departamento particular, y así fue que nos quedamos cerca de donde competíamos.”

“A nosotros nos gusta la competencia, uno se entrena, estudia, porque también estudiamos el lugar ya que hay un montón de variables que afectan a la competencia. Como nos gusta competir también nos gusta ganar y nos preparamos para estar ahí en la pelea. En la pelea estuvimos, fuimos protagonistas pero lamentablemente la medalla no se dio” cuenta Martín.

En la categoría que compitieron los Alsogaray corrieron 47 barcos y según explicó Martín dentro de ellos había un subgrupo de 15 países que podían llegar a competir por una medalla luego de los seis días establecidos de competición.

Al ser consultado sobre la forma en que organiza su tiempo para poder estudiar y al mismo tiempo dedicarse al deporte ya sea como entrenador o compitiendo indicó: “es complicado pero le estoy metiendo muchas ganas, porque si no le metes ganas y un poco de esfuerzo es realmente difícil. Hubo una época que viaje mucho y me costó, no me organicé bien, dejé materias, dije después las rindo libre y al siguiente año no hice ni las de ese año, ni las del anterior. Esta vez para los Juegos Olímpicos me agarra un poco más maduro y me organicé mejor aunque siempre requiere de mucho esfuerzo”, señaló el alumno de Agrimensura.   

Para lograrlo sabe que debe realizar un último esfuerzo. “Llegabade Río y quería estar en San Pedro, comer un asado con los pibes, disfrutar de la familia, pero bueno de Ezeiza me vine directamente para acá sin pasar por mi casa para poder arrancar bien el segundo cuatrimestre. Poder arrancar bien el cursado es muy importante” indicó el estudiante de la FCEIA.

Martín

En un futuro, una vez recibido, Martín espera poder complementar su trabajo como profesional con la competencia deportiva. Por ahora sabe que su objetivo está puesto en recibirse sin dejar de lado su pasión por el deporte. “La idea es tratar de complementar las dos cosas, laburar de forma independiente como Agrimensor en San Pedro, y si se puede correr y competir, o también hacer actividades relacionadas al deporte que me gusta y me hace bien.”